DESDE MI SOFÁ
Por: Obed Silva
(Militante del PRI)

TIJUANA BC 21 DE JULIO DE 2019.- Dentro de once días inicia la renovación de dos de los tres Poderes que integran al  Gobierno del Estado de Baja California. 

El Poder Legislativo será el primero y en ciento dos días el Poder Ejecutivo, mientras que el Poder Judicial permanecerá inamovible.

Muchos son los retos que la nueva administración pública tendrá que enfrentar con éxito para cumplir con la expectativa propiciatoria del cambio. 

En esta ruta, maliciosamente hay quienes le apuestan a que la nueva administración no tenga el éxito esperado, calculando con ello poder regresar por sus fueros perdidos.

Del otro lado, hay quienes piensan que el margen de tiempo para ofrecer los resultados que los ciudadanos esperan es muy breve. 

Entre una y otra posición la vida social continua y las asignaturas sin resolver para ofrecer a los bajacalifornianos un ambiente de paz, tranquilidad y seguridad, son muchas.

En la semana que termina, el INEGI dio a conocer los resultados de la encuesta nacional de seguridad pública urbana, correspondientes al segundo trimestre del presente año. En Baja California la encuesta se levantó en Tijuana y Mexicali. 

Los resultados de la encuesta nacional no son halagüeños ya que el 73.9% de los mexicanos encuestados dijeron no sentirse seguros; y aun cuando esta percepción bajó con respecto al anterior trimestre -que fue del 74.6%-, apenas se equiparó a la de diciembre de 2018 que fue del 73.7%.

Los resultados de la encuesta nos dicen que la percepción sigue siendo de inseguridad. 

Para el caso de Tijuana las cifras son más alarmantes.

De acuerdo con la referida encuesta, el 74.7 de los tijuanenses no nos sentimos seguros. Las cifras de homicidios en los primeros seis meses llegaron a mil 236 por lo que a este ritmo podrían llegar a los dos mil quinientos a fines de año. 

Lo anterior nos dice que la inhibición del delito está muy lejos de lograrse y cada dia la delincuencia actúa con la mayor impunidad, lo que le ha permitido cumplir las amenazas de muerte en contra de elementos de las corporaciones policiacas en Tijuana.

La citada encuesta nacional del INEGI, nos dice que en nuestra ciudad la principal percepción de inseguridad se presenta en los sitios cercanos a los cajeros automáticos, con un 78.3% de los encuestados, seguida del transporte público con el 58.6%, luego quedan los bancos y las calles por donde transitan las personas.

Todas las circunstancias anteriores tienen que ver estrictamente con el ámbito de la autoridad municipal. 

También la encuesta arrojó que en Tijuana las personas estiman en un 59.4% que la inseguridad seguirá igual y un 26.9% consideran que empeorará. Revelando la pesimista cifra de un 86.3% de tijuanenses que piensan que la inseguridad seguirá igual o peor. Superando con creces a los que piensan sentirse seguros y que es apenas el 25.3% de la población. 

De acuerdo con el artículo tres de la Ley de Seguridad Pública del Estado de Baja California, el servicio de seguridad pública debe, entre otros, mantener el orden y la tranquilidad pública, proteger la integridad física de las personas así como sus bienes y coordinar los programas de prevención de delitos. Objetivos que por lo visto, tanto las actuales administraciones estatal y municipal, no han cumplido en Tijuana.  

NOMAS POR JODER:

El "patas" es un adicto al golf.  Para evitar el escarnio decidió dejar de jugar en el Club Deportivo Campestre de Tijuana y se fue a refugiar al campo de Real del Mar. 

En el camino se topó con una cartelera espectacular en donde lo acusan de corrupto.  

A como va, terminará jugando en algún campo de golf enmedio del desierto en Arizona dónde no lo conozcan.

Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor.