AL FILO DE LA NAVAJA
Por: Raúl Ramírez Baena*

TIJUANA BC 23 JULIO 2018.- El pasado 1º de julio los candidatos Meade y Anaya salieron a los medios para aceptar que las tendencias no les favorecían, reconociendo el triunfo de AMLO en las urnas, tendencia refrendada más tarde por Lorenzo Córdoba, Presidente del INE. Por su parte, el Presidente Peña Nieto emitió el mismo día un mensaje sobre unas elecciones “en armonía (y) con plena normalidad democrática”. Mi primera reacción y estoy seguro que la de muchos fue de alivio: por fin, la guerra sucia y de odio terminó, el resultado fue tan contundente que se acabó la campaña insidiosa y ofensiva. Qué equivocado estaba.

Cuatro semanas después las cosas no sólo no han cambiado, sino que suben de tono, sobre todo en las redes sociales. Los que durante años fueron oposición ahora serán gobierno. Las críticas, posts, memes, burlas y demás que se emitían contra Peña Nieto se vuelven ahora contra AMLO y su Proyecto de Nación.

¿Debemos tomar esto como algo normal y natural? Pienso que sí. Sin embargo, hay que destacar que los señalamientos a Peña Nieto a lo largo de su sexenio se deben a una serie de errores, abusos y excesos durante su gestión y que, con sus Reformas Estructurales, han comprometido los recursos energéticos y tienen sumido al país en una crisis social, política, económica y de violencia sin precedentes.

Agenda progresista de gobierno

Las promesas de campaña de AMLO, definidas a partir de su mensaje del 1º de julio, luego, en la presentación de los 50 puntos del “Plan de Austeridad Republicana” y, destacadamente, las propuestas presentadas en distintos foros por la Ministra en retiro Olga Sánchez Cordero, quien asumirá la Secretaría de Gobernación, y por Alfonso Durazo, a la Secretaría de Seguridad Pública, las podemos resumir:

1) La amnistía en el marco de la justicia restaurativa, que no aplicará para delitos graves sino para campesinos y jóvenes pauperizados involucrados en actividades ilegales, empujados por su condición de vulnerabilidad;

2) Un plan de reconciliación y de paz con ayuda internacional, que tiene como prioridad la búsqueda de la verdad en el drama de las personas desaparecidas, teniendo como caso emblemático el caso de los 43 normalistas de Ayotzinapa;
3) Cumplir con los Acuerdos de San Andrés;
4) La despenalización de las drogas, política a la que se opone el gobierno de los EUA y que representa un gran reto diplomático para el nuevo gobierno;
5) La discutible creación de la Guardia Nacional con elementos de las Fuerzas Armadas y de la Policía Federal;
6) La despenalización del aborto, iniciativa que indudablemente chocará con las corrientes conservadoras y las iglesias;
7) La iniciativa de Ley de Voluntad Anticipada, que es el Derecho a la Muerte Digna por enfermedades terminales, contraria a las corrientes conservadoras;
8) Garantizar el acceso a la Educación Superior;
9) La reducción de salarios de los altos funcionarios de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, quienes no podrán percibir ingresos superiores a los del Presidente de la República;
10) El nombramiento de un Coordinador Estatal de Desarrollo en lugar de los Delegados Federales para cada dependencia en los estados;
11) La descentralización de las dependencias del gobierno federal, de la Ciudad de México a diferentes ciudades del interior de la República;
12) Desparecer el CISEN y crear en su lugar la Agencia Nacional de Inteligencia;
13) La revisión de los contratos y concesiones otorgadas por el actual gobierno a las empresas privadas en los proyectos energéticos, el Nuevo Aeropuerto Internacional de la CDMX y otros;
14) La renegociación del TLCN;
15) Bajar el IVA al 8 por ciento y duplicar el salario mínimo en las fronteras;
16) No aumentar el precio de las gasolinas por arriba de los índices de inflación;
17) Construir dos refinerías y rehabilitar seis existentes para bajar en tres años los precios de las gasolinas;
18) Promover en el país y en Centroamérica el modelo de la “Alianza por el Progreso” de los años 60 y 70, para frenar mediante el desarrollo y no la criminalización, la migración de personas hacia México y los EUA;
19) La cancelación de las millonarias pensiones a los ex Presidentes;
20) La desaparición del Estado Mayor Presidencial y el regreso de sus elementos a las Fuerzas Armadas, y
21) La venta del costoso y lujoso avión presidencial.

Estas propuestas, que merecen un gran debate nacional, modificarán el proyecto de país delineado a partir del sexenio de Miguel de la Madrid en 1982.

Lo que vemos hoy en las redes sociales no es una crítica y discusión seria sobre estas propuestas de gobierno, sino descalificaciones, como una revancha de sus opositores y un rechazo de corrientes de la derecha y de la izquierda radical.

La pugna es alimentada por el acuerdo del INE de imponer una multa de $167 millones de pesos a Morena al considerar, sin comprobar aún, que incurrió en un delito electoral al establecer un esquema de financiamiento paralelo al de las partidas presupuestales asignadas a los partidos en la operación del fideicomiso privado “Por los demás”, creado por AMLO, no por Morena, para apoyar a los damnificados de los sismos de septiembre pasado, diferendo que tendrá que resolverse bajo estricto derecho por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

*Director de la Comisión Ciudadana de Derechos Humanos del Noroeste

Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor.