Al filo de la navaja
Por: Raúl Ramírez Baena*

TIJUANA BC 16 ABRIL 2018.- Por si algo hacía falta, el proceso electoral se enturbió en extremo luego de la resolución tomada por cuatro de los siete magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que revirtió el acuerdo del Consejo General del INE de negar el registro a Jaime Rodríguez Calderón, el Bronco, en sus aspiraciones para convertirse en candidato independiente a la Presidencia de la República.   

La negativa al registro del Bronco no fue una decisión ligera del INE, fue sustentada en virtud de que, en la recopilación de firmas por parte del aspirante (y también por Armando Ríos Piter y Margarita Zavala), se cometieron graves ilegalidades de las que el INE dio vista a la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales (FEPADE).

Teniendo como antecedente las elecciones de Estado realizadas en Coahuila y el Estado de México, avaladas por el TEPJF, en el caso del Bronco el Tribunal cometió dos graves errores: el primero fue ordenar su inscripción en la boleta electoral sin ponderar el fraude cometido en la recopilación de firmas de apoyo, al asumir una posición en extremo garantista, argumentando que no se le otorgó al Bronco el derecho de audiencia, pasando por alto las irregularidades encontradas por el INE en la compulsa sobre la validez de las firmas que obtuvo. 

El segundo error fue, después de que se le vino el caudal de críticas, denostar al Consejo General del INE, que marco sus diferencias con el Tribunal por la resolución que adoptó respecto al Bronco. A pesar de ello, el INE acató la decisión del TEPJF de inscribirlo en la boleta, por ser la última autoridad jurisdiccional en materia electoral.

La vox populi dice que el TEPJF recibió “línea” desde Los Pinos para beneficiar al Bronco y perjudicar a AMLO; éste reforzó la idea.

En el desarrollo del proceso electoral, los estrategas de campaña se aprovechan de la desinformación, el bajo nivel de cultura política y los sentimientos de miedo de la población, al sembrarse en el inconsciente colectivo, a través de sugestivos spots, serias dudas respecto a un supuesto retroceso en las políticas de seguridad, laboral, educativa, energética y social, comparando lo que sucedería en México con lo que supuestamente sucede en Venezuela de darse el triunfo de AMLO, o que éste quiere pactar con los delincuentes.

Las incontrolables redes sociales son el escenario ideal para desatar la guerra de odio, parecida a una batalla campal. Mensajes y memes de burla y denostación son lo común por bots contratados para sembrar la confusión y la división. El objetivo es promover el desánimo para que la gente se harte de la política, califique a todos los candidatos por igual y se aleje de las urnas, beneficiando a quienes hacen uso de recursos públicos y privados mal habidos para la compra y coacción del voto o explotando su “voto duro” en las urnas.

Meade ha decidido desarrollar su estrategia electoral mediante el ataque directo a AMLO. En un enfrentamiento en Oaxaca entre simpatizantes del PRI y maestros de la CNTE, condenó "la violencia y los actos de agresión contra periodistas y ciudadanos cometidos por la CNTE", adjudicándolos a “la intolerancia alimentada" por López Obrador. En el Estado de México, en evento realizado con el rijoso Movimiento Antorcha Campesina, Meade lanzó una grave advertencia, refiriéndose a la propuesta de suspender la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México: “sólo a Andrés Manuel López Obrador puede ocurrírsele su cancelación. Su propuesta de frenarlo es clara: frenar las oportunidades de miles de familias, mejor frenémoslo a él”.

El colmo, el spot en el que una mujer, a media noche en su cama, teme que su hija pierda el trabajo de maestra: “el peje quiere echar atrás la reforma, ni siquiera quiere que los niños aprendan inglés. Tengo miedo”. El marido la consuela: “tranquila, va a ganar Meade”. Cierra el spot con Meade a cuadro: “confía en mí. Voy a ser tu presidente y en mi gobierno los maestros van a estar mejor capacitados y mejor pagados”.

Por otro lado, las señales que provienen de la Presidencia de la República no son nada alentadoras: Peña Nieto se ha metido abiertamente en la campaña. Para encubrir la alta corrupción oficial y no manchar a su partido y su candidato, decidió destituir de manera fulminante al fiscal de la FEPADE, Santiago Nieto, quien investigaba la presunta corrupción de Emilio Lozoya por el caso Odebrecht, y la utilización de la PGR para filtrar una inusual y expedita investigación sobre presunto lavado de dinero de Ricardo Anaya, supuestamente para bajarlo del segundo lugar en las encuestas. 

En un evento en el Estado de México, el Presidente hizo un llamado a la sociedad mexicana a conformar un frente en defensa de la Reforma Educativa, luego de que AMLO prometiera su cancelación en caso de ganar la elección. 

Y en vísperas de un aniversario más de la Expropiación Petrolera, Peña declaró que el próximo primero de julio no sólo estará en juego la Presidencia de la República sino también el futuro de la reforma energética. “La disyuntiva está entre regresar a los dogmas del pasado (léase votar por AMLO) o seguir con los postulados del presente (léase votar por Meade)”, dijo.

Y aún faltan más de dos meses de campañas...

* Director de la Comisión Ciudadana de Derechos Humanos del Noroeste

Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor.