Procesos Políticos
Por: Abel Muñoz Pedraza


*.- Y su estancamiento en la carrera presidencial

Durante estos días varios medios de comunicación y personajes del mundo intelectual han cuestionado la candidatura presidencial de Andrés Manuel López Obrador, sobre todo porque no se ve que despegue en las preferencias electorales de los ciudadanos que miden diversas casas encuestadoras de reconocimiento nacional. El último que lo hizo fue Enrique Krauze, reconociendo que el candidato de las izquierdas ha moderado su discurso en comparación con la elección de 2006, sin embargo, para el historiador oriundo de la Ciudad de México, Marcelo Ebrard es el político más capaz para gobernar el país, por encima de AMLO y del resto de los candidatos.

Sin duda alguna, AMLO ha buscado cambiar su imagen frente al electoradoen los últimos meses a través de su “República Amorosa”, ya que todavía quedan vestigios de aquellas movilizaciones, plantones y del gobierno “legítimo” que encabezó después de la elección presidencial que se celebró el pasado 2 de julio de 2006, definida por 234, 934 votos y una diferencia de 0.58 por ciento ante Felipe Calderón.

Los eventos postelectorales dieron pie para que la ciudadanía cuestionara la actitud que el ex candidato adoptó, reprobándolay, hasta la fecha, restándole simpatías y acumulando opiniones negativas hacia su figura y, por ende, generando desconfianza hacia su persona. Pero hasta ahora, los números indican que la estrategia del amor no ha funcionado y tampoco ha servido la apertura y transparencia que ha tenido frente a la ciudadanía al revelar sus propuestas políticas y a las personalidades que lo acompañarían en su gabinete, otorgando así elementos para que la ciudadanía evalúe y compare con el resto.

En la siguiente tabla se expone una recopilación de datos de seis casas encuestadoras que han recogido información sobre las preferencias electorales de lo ciudadanos sobre los tres virtuales candidatos a la presidencia durante los meses de noviembre de 2011 a febrero de 2012.

Fuente: Elaboración propia con datos de las empresas que elaboraron las encuestas.
*Notas:

1) Estas cifras fueron consultadas del 20 al 22 de febrero de 2012 y toman en cuenta al sector que sigue indeciso y no al voto efectivo. Se contemplaron a casas encuestadoras que permitieran el acceso público a los reportes.

2) La metodología aplicada por las diferentes casas encuestadoras puede variar (tamaño y selección de muestra, error muestral, técnica de recolección de datos y nivel de confianza).

3) Los meses que se contemplan para la elaboración de la tabla corresponden al periodo de noviembre de 2011 a febrero de 2012, sin embargo, existen empresas que no realizaron levantamiento en algunos meses o, si lo hicieron, no se pudo tener acceso a la información.

4) No se incluye Gabriel Quadri, virtual candidato del PANAL, ya que su nominación fue reciente.

5) Algunas de las empresas encuestadoras que aquí aparecen presentaban datos con decimales y redondeados. En esos casos, para la elaboración de esta tabla, se recurrió a los redondeados.

En el resumen de las preferencias electorales de las seis casas encuestadoras que seleccionamos, podemos observar que los diferentes porcentajes de AMLO oscilan entre 16 y 30 puntos, con un promedio de 19.63%. Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota promedian 44.09% y 24%, respectivamente.

Sin embargo, con excepción de la encuesta de Covarrubias y Asociados que ubica a AMLO en segundo lugar con 30 puntos, en el resto de las encuestas, y sobre todo, en las que tienen dos o más levantamientos, se puede observar que el crecimiento de AMLO a lo largo del tiempo ha sido magro, ya que obtiene una tasa de 1.6% en cuatro meses, tomando en cuenta que lleva más tiempo haciendo campaña de manera informal. En cambio, Josefina Vázquez Mota se ha posicionado en el segundo lugar en la mayoría de las encuestas y su tasa de crecimiento es de 2.8%, sin olvidar que apenas obtuvo este mes la candidatura por su partido y que su tendencia se observa a la alza. Enrique Peña Nieto cuenta con una tasa de crecimiento negativa al registrar -0.8%, sin embargo, esto se veía venir porque lleva varios meses encabezando las encuestas y registrando altos porcentajes de intención del voto, sumado a que desde hace tiempo mucha gente ya daba por hecho que iba a ser el abanderado priista y para entonces no tenía competencia con el resto de los partidos.

Hay que señalar que las encuestas son una “fotografía del momento” y que aun hay que esperar a que pasen los periodos de “intercampañas” y campañas para observar cómo se van modificando estas cifras, ya que la actividad e intensidad política irán creciendo con el tiempo y habrá más variables que incidirán en las preferencias electorales de los ciudadanos.

Fuente: Elaboración y cálculos propios con información con los datos de las empresas que elaboraron las encuestas.

*Nota:

1) Para el cálculo de la tasa de crecimiento se contemplaron las encuestas de Consulta Mitofsky, GEA – ISA y Buendía y Laredo/El Universal, ya que permiten comparar los porcentajes con dos o más periodos y establecer la tasa de crecimiento.

También ha habido espacios para las especulaciones y en algunos círculos se ha comentado  que Marcelo Ebrard tendría que entrarle al quite,buscando que AMLO renuncie a su aspiración presidencial, sobre todo porque la semana pasadaLópez Obrador manifestó en un evento privado con empresarios que se sentía cansado y que si perdía se iba a “la chingada”, ésta última frase como expresión coloquial que significa retirarse por completo de una actividad, en su caso de la política o como expresión literal, que significaría irse al ranchoheredado por sus padres llamado “la chingada”, ubicada en el municipio de Palenque en el estado de Chiapas.

Afortunada o desafortunadamente, la sustitución de AMLO por Marcelo Ebrard es solamente un sueño guajiro, ya que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece en el artículo 82, fracción sexta, que “Para ser Presidente se requiere: No ser Secretario o subsecretario de Estado, Procurador General de la República, gobernador de algún Estado ni Jefe de Gobierno del Distrito Federal, a menos de que se separe de su puesto seis meses antes del día de la elección” y Marcelo Ebrard sigue ostentando el poder ejecutivo de la capital.

El reto principal para el hombre que encabeza a la coalición de izquierdas es sin duda despertar interés y simpatías en ciudadanos que aun no definen por quién van a votar (aproximadamente un 20 por ciento) y recobrar la confianza de las personas que en 2006 le dieron su voto y que actualmente no estarían dispuestos a volver a dárselo. Probablemente darle un giro a la campaña, volviéndola más atractiva para la gente, podría despertar alguna duda en los escépticos.

La pregunta es sencilla: ¿Le alcanzará a Andrés Manuel López Obrador para emparejar al segundo lugar y meterse de lleno a la competencia? Aun resta mucho tiempo para el día de la elección y las campañas no han empezado, además de que en política pueden pasar muchas cosas inesperadas, pero lo que sí está claro es que su “República Amorosa” no “prende” y no será suficiente para convencer al electorado que confíe en él de nueva cuenta. La razón es muy sencilla: ya no le creen.

Abel Muñoz Pedraza es estudiante de la maestría en Estudios Sociales con línea en Procesos Políticos de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) en la Ciudad de México. Es egresado de la licenciatura en Relaciones Internacionales de la Facultad de Economía y Relaciones Internacionales de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), campus Tijuana. Correo electrónico: [email protected]
Las opiniones expresadas en esta columna son responsabilidad del autor.