REFLEXION DEL DIA
Por:  Lic. Esteban Capella Ibarra

TIJUANA BC 18 DE MAYO DE 2022.- La teoría de los vidrios rotos fue introducida en un articulo por los sociólogos James Wilson y George Kelling  en 1982 y fue mas popular y aplicada en la época Rudolph Giuliani como alcalde de Nueva York por allá de los años 90.

La teoría de los vidrios o cristales rotos no es más que una premisa que sostiene que un entorno de evidente deterioro invitará o conducirá a conductas de carácter antisocial y de destrucción que paulatinamente irán en aumento. Se le nombra como la teoría de los vidrios rotos porque ejemplificandola en un edificio en abandono si muestra en principio signos de deterioro a través de ventanales rotos, paulatinamente las conductas de vandalismo se darán de forma ascendente y se estarán presentando en dicho inmueble cada vez mas hasta llegar al deterioro y destrucción total por la acción del vandalismo.

Cuántos casos no vemos o hemos visto en nuestra ciudad de autos abandonados que muy posi-blemente fueron robados y de repente aparecen en diferentes calles de colonias de nuestra ciudad. En muchos casos pasan días y de repente notamos que se empolvan, posteriormente aparecen con un vidrio roto, de repente comienzan a ser desmantelados hasta quedar práctica-mente el puro cascaron generando una percepción de inseguridad  e intranquilidad en el en-torno.

Aquello lo que comunica es una clara ausencia de la autoridad preventiva y por ende una sensa-ción de abandono en la comunidad. Afortunada y desafortunadamente no todo es responsabili-dad de la autoridad, en estos casos es evidente una clara omisión de la participación del ciuda-dano en la solución de este tipo eventualidades que propician convertirse en notorios problemas de inseguridad en la comunidad.

En nuestra ciudad de Tijuana hoy podemos ser testigos de que esta teoría se comprueba cuando detenidamente observamos todas las casetas que fueron instaladas como parte del Sistema Integral de Transporte de Tijuana en las que se ha cedido terreno a las conductas vandálicas y de carácter antisocial permitiendo que hoy luzcan destruidas, rayadas y deterioradas.

La teoría aquí expuesta más allá de darnos una causa de la problemática, no brinda una clara idea de cuál puede representar una parte de solución inmediata a la percepción de inseguridad que vivimos. En principio debemos de trabajar en no ser omisos ante el deterioro y destrucción de nuestro entorno, ello puede representar un freno y hasta una reversion a muchas de las conduc-tas delictivas que hoy vivimos en nuestra ciudad.

*El autor es Licenciado en Derecho y Activista Ciudadano. 

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