DESDE MI SOFÁ
Por: Obed Silva

TIJUANA BC 28 DE FEBRERO DE 2021.- El dirigente estatal de Morena hizo un ferviente llamado para que los morenistas que resulten postulados como candidatos y ocupen un cargo público se separen del mismo.

Cabe señalar que la Ley Electoral dispone que los servidores públicos, cualesquiera que sea su empleo, cargo o comisión y que vayan a ser registrados como candidatos, están obligados a separarse de sus empleos 90 días antes del día de la elección o sea el próximo 6 de marzo.

La anterior regla tiene una excepción pues como recordará el amable lector el Congreso local aprobó una reforma para que quienes ocupen un cargo de elección popular y deseen que los elijan de nuevo, no se tengan que separar del cargo para hacer su campaña electoral. 

Muchos supusieron que el hecho de no separarse del cargo para buscar reelegirse les sería de gran ayuda pero, en mi opinión, a los munícipes les resultó contraproducente. 

Como es del dominio público, cuatro de los cinco presidentes municipales de Morena en Baja California se inscribieron para que su partido los postule de nuevo. 

Si bien es cierto que los mencionados representantes populares no tienen que separarse de sus cargos para buscar reelegirse, el principal escollo para lograr su objetivo lo tienen en la prohibición de utilizar los recursos públicos a su alcance para hacer sus respectivas campañas electorales.

Al efecto, el acuerdo 635/2020 del INE que contiene "los lineamiento para la elección consecutiva de diputados", establece que para mantener la equidad en la contienda, el INE llevará a cabo una especial fiscalización, vigilancia e investigación de los recursos económicos que recibirán y gastarán los candidatos postulados para buscar su reelección.

Habrá que agregar que el asunto se les complica aún más a los cuatro munícipes morenistas que aspiran a reelegirse ya que el artículo 9 TER de la Ley del Régimen Municipal les ordena expresamente que:

1. No pueden promocionar o publicar las acciones de gobierno realizadas durante el periodo que comprende del inicio de las precampañas el día 23 de diciembre de 2020 y hasta la conclusión de la jornada electoral el próximo 6 de junio.

2. No pueden estar presentes en actos públicos en donde se entreguen beneficios de programas sociales.

3. No pueden utilizar recursos públicos con motivo de su cargo para promover o influir de manera alguna en el voto a su favor.

4. No pueden ocupar personal adscrito a la nómina de sus Ayuntamientos para realizar actos de campaña.

De tal suerte que las anteriores prohibiciones así como las previstas en el artículo 134 de nuestra Carta Magna y en otras disposiciones legales, les "amarra las manos" a los actuales ejecutivos municipales para gobernar y hacer campaña electoral al mismo tiempo. 

Como se puede apreciar, para las actuales presidentas y presidente municipal  hacer su campaña para buscar reelegirse será una tarea poco menos que imposible. 

Para evitar denuncias por el uso ilegal de recursos públicos, lo aconsejable para los reeleccionistas sería que soliciten permiso para "ausentarse" de manera temporal o definitiva de sus cargos. 

Nada más que ahí también tienen un serio problema ya que conforme a la extraordinariamente mala redacción del artículo 42 de la Ley del Régimen Municipal las "ausencias temporales" se autorizan por 29 días por lo que los ediles se verían obligados a pedir varios permisos por 29 días hasta el 6 de junio teniendo que llamar a sus suplentes (quien tenga suplente) para cubrir las consecutivas ausencias. 

La opción de pedir un permiso para una "ausencia definitiva" también les trae aparejado un problema a los ediles ya que conforme con lo aprobado por el Congreso, tendrían que separarse de su encargo "definitivamente" y hasta el fin de su mandato legal pero como lo que quieren los munícipes es chiflar y comer pinole, lo más probable es que no pedirán ni uno ni otro de los permisos que prevé la Ley.

Vaya lío el que provocó la reforma morenista para que sus ediles no tuvieran que separarse de sus encargos y hacer campaña electoral pues la misma les resultó más un problema que una solución. 

No cabe duda que en el pecado llevan la penitencia y el fantasma de Francisco I. Madero les está pasando la factura a los reeleccionistas. 

NOMAS POR JODER:

Una fuente reporta que al interior de los dos "frentes opositores" cundió el pánico ante la posibilidad de que el gobernador Jaime Bonilla se separe de sus funciones para coordinar la campaña de Morena.

Desde el punto de vista legal es válido ya que el artículo 45 de la Constitución Local le permite al gobernador separarse temporalmente de sus funciones hasta por 30 días con solo dar aviso al Congreso. 

Desde el punto de vista político, el gobernador rompería un paradigma por lo que sería acusado de actuar "políticamente incorrecto". 

Sin embargo, vivimos en una época en donde los tabúes se derrumban y el gobernador Bonilla no es un político tradicional. 

Es muy probable que el terror termine por tomar presos a los enemigos de la 4T frente al gran tsunami que se les avecina, ni modo, los tiempos cambian.

Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor.