DESDE MI SOFÁ
Por: Obed Silva

TIJUANA BC 17 DE ENERO DE 2021.- Carentes de propuestas y cargando un pesado fardo de desprestigio, el PAN y sus satélites montaron un Reality Show para atraer la atención del electorado.

Este género del espectáculo televisivo tuvo su origen en 1991 pero fue hasta el año 2000 cuando saltó al ámbito mundial con los exitosos programas Survivor y Big Brother.

Los principales elementos de este tipo de telerrealidad son; que sus participantes sean personas de la vida real y que su actuación no se ajuste a un guión preestablecido. 

Un Reality Show es atractivo mientras más peleas se produzcan entre los participantes y cuantas más intrigas, traiciones y escándalos se exhiban en cada capítulo. 

El secreto del éxito es mantener a los espectadores atraídos por el conflicto, ya que de esa manera se toma partido y el público entabla lazos de simpatía con uno u otro personaje a quien terminan apoyando.

De tal suerte, que el conflicto es el eje que provoca captar mayor público y audiencia.

Al final, lo que un Reality Show busca es que el entretenimiento despierte el interés a todo tipo de público para que la audiencia crezca y traiga beneficios a la empresa productora del Show.

Apoyados en la exitosa idea de los Reality Shows, el PAN y sus partidos satélites armaron un Big Brother para postular a sus candidatos en Baja California.  

Un día anuncian aspirantes y al día siguiente los nominan a salir del juego.

Para el deleite del público, la albiazul casa productora del Show reclutó al ricachón, al guerrillero, al militar, al delegado rijoso, al fiscalista, al tío Lucas y sus sobrinas, a la jitomata, al ingenuo líder de partido, al urbanista, al pastor evangelico, a la senadora y a otros "actores políticos" que durante varios meses han jugado su rol para atraer a los espectadores. 

Un dato  interesante de la trama es que la empresa productora albiazul desde un principio le anunció a sus socios que el papel protagónico lo ocuparía una mujer, despertando airadas protestas entre quienes desean fervientemente que la oportunidad de protagonizar el Reality Show sea para un afamado personaje. 

Para presenciar el más reciente de los capítulos, el público se armó de una buena dotación de palomitas y se deleito con los berrinches del más conocido del elenco quien amagó a su representante artístico con irse a una modesta televisora local sino le dan el papel protagónico en el Show Azul.  

El conminado representante tricolor no dijo "ni pio" por lo que la expectativa del público es que el personaje cumpla hoy con su amenaza y termine por irse a fortalecer a la modesta empresa local. 

De suceder tal hecho, surgiría una nueva versión de Reality Show pero ahora a cargo de la empresa local pbc aunque de último momento trascendió que otra pequeñísima empresa, denominada pes, le entró a la puja ofreciendo no solo registrar al famoso sino también la franquicia de "el militar" quien, aunque anda prófugo, también es miembro original de la casa del Big Brother azul. 

De llegar a concretarse los acuerdos del famoso personaje con una u otra de las pequeñas empresas, le quitarán audiencia a la grande que presume contar con una "acción nacional".

El dato desalentador para las empresas que se disputan los personajes del Reality Show es que su propósito de atraer una gran audiencia difícilmente rendirá frutos pues la atención de los espectadores está más en cómo sobrevivir a la Covid19 que en preocuparse por los intríngulis de los actores políticos.

En síntesis, lo más probable es que el afán por montar el mejor Reality Show no producirá dividendos a los ahora confrontados pues tanto unos como otros cargan un costal lleno de desprestigio al que no le pueden eliminar el fétido olor que despide con un entretenido montaje mediático. 

Con todo y eso, el Reality Show Electoral ¡debe continuar!... 

NOMAS POR JODER:

A muchos les intriga el interés por las "campañas electorales".

Lo que muchos no saben es que hay quienes ya le encontraron la manera de convertirlas en lavanderías. 

Bien haría la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales en echarle un ojo al origen, montos y destino del dinero que gastan los candidatos.

Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor.