DESDE MI SOFÁ

Por: Obed Silva
(Militante del PRI)

TIJUANA BC 29 DE DICIEMBRE DE 2019.- Desde que tengo quince años, siempre que se acerca la Noche Buena me acuerdo de “El Cochi”. 

“El Cochi” era un muchacho flaco de tez morena y cabello lacio, cuya vida sin esperanza giraba en torno a una bolsita de plástico con Resistol 5000.  

Él, como despectivamente se les llegó a bautizar a miles de jóvenes, era un nini pues ni estudiaba ni tenía empleo y vivía en la calle. 

Una noche, en vísperas de Navidad, fui a cerrar un pequeño negocio de llantas que tenía mi papá en la colonia Libertad y me topé con “El Cochi” quien me pidio “¿si lo podía dejar dormir en la llantera?” a lo cual le conteste que sí. 

Cuando ya me iba me dijo; “gordo,  ¿me puedes dejar el radio para oír la Navidad?”... con un nudo en la garganta le ofrecí que fuera a mi casa pero rechazando la invitación me contestó; “no así está bien”. 

Cerré el pequeño negocio familiar y me fui pensando en lo cruel que resulta la vida para muchas personas.

Así, pasando su triste existencia, una mañana amaneció “El Cochi” muerto en la calle, bien tieso de frío y con su bolsita de Resistol 5000 aferrada en la mano.

En la colonia Libertad, en donde viví 32 años, abunda la droga. 

De chamaco veía a los “píldoros” como sonámbulos por la calle y de más grande veía a los muchachos fumar marihuana en las esquinas y a los “rucos” inyectarse heroína. 

En el suelo de los callejones de la colonia se veían jeringas y alguna persona tirada pasando “el viaje” o sufriendo “la malilla”.

El nandys, el cabezón, el fer, el fantasmita y muchísimos como "El Cochi", murieron por culpa de las drogas. Algunos en la calle, otros en la cárcel y otros en el hospital. 

En los últimos 30 años nos llegó el cambio, pero para ¡empeorar! 

Hoy, las “tienditas” proliferan en la ciudad y miles de familias sufren a diario por las adicciones.

La estadística por el uso y abuso de sustancias psicoactivas es alarmante y con un crecimiento exponencial. 

Las adicciones no respetan edad, sexo o condición social. 

Igual arrasan con adinerados que con pobres, dejando una secuela de muertes que, según el registro de la Fiscalía General del Estado hasta el mes de noviembre, asciende a 2 mil 635 homicidios, sólo en Tijuana.

Según la Encuesta Nacional de Adicciones, en 2008 el consumo de sustancias psicoactivas de los mexicanos de entre los 12 y 65 años de edad, se incrementó en un 4.6 por ciento.

En Baja California este incremento es superior al promedio nacional ya que, según el Conadic, en 2008 la incidencia acumulada para nuestro estado es de 9.3 por ciento. 

De la acuerdo con cifras que arrojó la encuesta del Observatorio Estatal de las Adicciones del Instituto de Psiquiatría de Baja California para el año 2017, por debajo de alcohol y tabaco, la metanfetamina ocupó el tercer lugar en el consumo de drogas en el Estado con un 2.5% de prevalencia entre la población. 

Lo anterior podría equivaler a la escalofriante cantidad de 82 mil 900 consumidores de metanfetamina en Baja California.

De acuerdo con expertos, nuestra entidad tiene el tercer lugar en el ámbito nacional en adicciones y podría ocupar el primero si se nos comparara proporcionalmente con el número de habitantes de ciudades como Monterrey y Ciudad de México.

El pasado 5 de julio el presidente López Obrador presentó la Estrategia Nacional para Combatir y Prevenir las Adicciones y aseguró que; “para disminuir la violencia del país es necesario atender las causas y una de ellas es el descuido de la juventud...”

En congruencia con el Presidente, el pasado 25 de agosto el ahora titular de la Secretaría de Salud del Estado declaró que para la nueva administración estatal uno de los principales temas que atacaran es el de las adicciones.

Agregó que tal actividad la atenderá la Secretaría de Salud y afirmó; "lo vamos hacer en tres grandes áreas; (el) preventivo, tratamiento de adicciones y seguimiento-rehabilitación”.

Pero también reconoció que "este tema requiere mucho apoyo, el cual actualmente no lo tiene, ni con personal o recursos financieros."

Ojalá que nuestros legisladores estatales hayan entendiendo el mensaje del líder de la 4T y, en congruencia, procurar recursos económicos suficientes en el presupuesto 2019 para atender este terrible problema de salud pública en Baja California. 

NOMAS POR JODER:

El último capítulo de: "La historia de los moches y los mil 200 millones de kiko", estuvo muy aburrido. 

Ojalá el guionista tenga preparado un episodio más emocionante con el cual entretenernos esta semana.

Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor.