Por: Norma Y. Cortés
Tijuana BC 28 de junio 2016 (AFN).- Juan Villoro, recién galardonado con el Premio Hispanoamericano de Poesía Ramón López Velarde 2016, presentó en Tijuana "Mientras nos dure el veinte", en la Sala de Espectáculos del Centro Cultural Tijuana, como parte de los festejos del 31 aniversario del CECUT.
El rockero, que nació escritor, contó canciones ante un público que palmeó insistentemente hasta que se levantó el telón.
Acompañado por Diego Herrera en los teclados; Alfonso André en la batería; Javier Calderón en la guitarra y Federico Fong, en el bajo, el concierto se abrió con los acordes del tema Hawai 5-0, de Morton Stevens.
Entre las crónicas defeñas de su libro Tiempo Transcurrido, el escritor combinó poemas de Abigael Bohórquez y la Misa fronteriza de Luis Humberto Crosthwaite con la que dijo: “vamos a hacerle un homenaje a Trump".
Antes de leer a Neruda, Villoro expresó que lo único que no han vendido en México, es el aire.
Villoro fue contando una a una las canciones: Madona de Guadalupe, Los misterios de la radio y Glitter en la colonia Lindavista.
Le dedicó su concierto al escritor tijuanense Federico Campbell, quien dijo le dio la primera oportunidad de publicar.
No pasó por alto el trabajo de su finado amigo Octavio Hernández, Bibliorock, a quien reconoció como inspirrador de la mezcla del rock y la palabra.
Evocó la suerte de haber conocido al profesor Rubén Vizcaíno quien le confesó que le gustaba vivir en Tijuana porque está cerca de la frontera, pero lo más importante, "es que nunca la cruzo".
En una tarde muy tijuanense, Villoro bautizó a Tijuana como la Janis Joplin" de las ciudades, donde es posible todo híbrido.
"Hoy estuve frente a ese muro que ignominiosamente separa México de Estados Unidos y leí esta frase que dice; Aquí es donde rebotan los sueños, vamos a tratar de contribuir todos nosotros para seguir soñando en espera de que haya algún día una frontera donde los sueños no reboten.
Después de narrar la historia, La moneda faltante, Villoro leyó, a sugerencia de Diego Herrera, Artículo de Fe, donde hace reflexionar sobre los estereotipos y la necesidad de comunicarnos.
Relajado, accesible y con el rockero a flor de piel, Villoro invitó a los asistentes a la firma de autógrafos en el vestíbulo: voy a firmar libros, discos, lo que sea, hasta senos, concluyó.